Limpieza de parking

En primer lugar, hay que considerar los diferentes residuos y tipos de suciedad que podemos encontrar en un aparcamiento. Las necesidad de limpieza vienen determinadas por la presencia de:

• Grasas y aceites usados.
• Todo tipo de líquidos provenientes de los vehículos.
• Pequeños desperdicios: envoltorios, restos de comida, etc.
• Telarañas.
• Insectos, ratas y otras clases de plagas incipientes.
• Acumulación de gases tóxicos en un entorno mal ventilado.

Además, debemos tener en cuenta que: Habrá gran cantidad de vehículos que no deben ser dañados por el contacto con productos de limpieza agresivos, choques o golpes con la maquinaria de limpieza, etc. Deben cuidarse los acabados del garaje, la pintura del suelo y toda la señalización.

Hay muchos elementos en los que puede acumularse la suciedad, y todos ellos deberán ser repasados de forma periódica: extintores, columnas, esquinas, papeleras, tuberías de todo tipo, interruptores, etc. Puede ser necesario limpiar sustancias tóxicas o peligrosas que se hayan derramado de los vehículos. Algunas las hemos mencionado líneas arriba: grasas, aceites, etc.